27.11.07

Apuntes sobre Jaime Labastida


Siempre es grato hacer una pausa y releerlos. Volver a ellos. Nutrirse. Y vibrar con sus palabras. Siempre es grato.

Jaime Labastida Ochoa, filósofo, poeta, ensayista

Pedro Díaz G.

Humboldt, ese desconocido, Estética del peligro, Obsesiones con un tema obligado, Animal de silencios, La palabra enemiga, todas, obras del literato Jaime Labastida Ochoa.

Poeta agudo obsesivo y tenaz, pensador profundo y lírico no exento de la razón de vivir, avanza en el universo de lo imposible.

(Me despertó no sé si el roce de tu cuerpo o el dulce sonido de tu respiración nocturna. Puedo correr, andar desnudo por el mundo. Entraré en la distancia, habré volado el cielo. De la geografía total del universo, apenas un espacio me interesa; sólo un espacio azul me pertenece: es el vértice exacto de tu cuerpo).

Su vida es un constante diálogo que enriquece a todos, es promotor cultural, hombre comprometido con su estado, al grado de que él prefiere, entre todas las del español, la palabra gratitud, no solo los aspectos fónicos, sino por todas las imágenes que le evoca el hablar de Sinaloa.

El actual director de Siglo XXI Editores se encuentra inmerso en la batalla contra los grandes consorcios españoles, que invaden al país con libros de altos precios y no siempre garantizada calidad.

Es mochiteco, poeta, y ensayista. Mucho de su obra literaria contiene textos que van desde Producción, ciencia y sociedad: de Descartes a Marx, a los ensayos sobre El Quijote de la Mancha, y gran parte de su legado ha sido traducido al inglés, francés, japonés, italiano, ruso y portugués.

Nació en 1939 y casi para cumplir 70 años de edad dicta conferencias sobre Cervantes Saavedra, lee a Kant, Hegel, Freud y Lacan, ocupa la silla número 27 de la Academia Mexicana de la Lengua, desde abril de 1998, y es también miembro de la Academia Española de la Lengua.

De su ficha biográfica se podrá decir que destacan sus estudios de licenciatura en filosofía en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM; que es miembro de la Asociación Filosófica de México; que ha impartido cátedra en la Universidad Michoacana, en la Escuela Nacional Preparatoria y la misma FFL-UNAM.

Que en 1981 recibió el Premio Internacional de Poesía Ciudad de la Paz y el Premio Jaime Sabines; en 1984, el Premio Nacional de Periodismo, que otorga el Club de Periodistas de México; en 1987, el Premio Literario José Fuentes Mares; en 1992, el Premio Nacional de Periodismo, que entregaba el Gobierno de la República; en 1996 el Premio Xavier Villaurrutia, por sus libros Animal de silencios y La palabra enemiga; en 1998 fue nombrado Caballero de la Orden de las Artes y las Letras por el Ministerio de Cultura de la República Francesa, y recibió la Cruz al Mérito conferida por la República Alemana, en 2001; obtuvo además el Premio Sinaloa de las Artes, en 2005. Y es miembro fundador de El Colegio de Sinaloa desde abril de 1998.

Pero al hombre de innumerables cargos en la vida cultural del país, lo retratan mucho mejor sus poemas, las ideas vertidas en cientos de hojas de papel a lo largo de su vida. En 1968 obtuvo la licenciatura en Filosofía por la Universidad Nacional Autónoma de México con la tesis La manufactura y su reflejo en la filosofía de Descartes, la cual recibió mención honorífica. A la licenciatura siguieron la maestría y el doctorado, este último de nuevo con una tesis sobre René Descartes: Problemas que se derivan de los conceptos de extensión y pensamiento.

Maestro, investigador, ensayista, periodista y poeta Jaime Labastida ha dictado más de 300 cursos o conferencias en universidades e instituciones de educación superior en México y el extranjero y ha representado a México en coloquios y congresos en Estados Unidos, Francia, Italia, Austria, Cuba, Alemania, Portugal, Puerto Rico, Venezuela, Brasil, El Salvador, Ecuador y Canadá.

Es Doctor Honoris Causa por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, también miembro de la Sociedad General de Escritores de México. Todo esto es Jaime Labastida.

Pero las palabras que le describen son gratitud, Sinaloa, y... De la geografía total del universo, apenas un espacio me interesa; sólo un espacio azul me pertenece: es el vértice exacto de tu cuerpo.

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